Tijuana.- En respuesta a la creciente ola de homicidios que azota Tijuana, el Ejército Mexicano ha desplegado un contingente sin precedentes de más de dos mil efectivos en esta frontera, en un esfuerzo por contener la alarmante cifra de crímenes que ha persistido en los últimos meses.
El despliegue de tropas ha sido inmediato y continuará en aumento, con 600 elementos adicionales que se unieron este lunes a la operación, coincidiendo con la perturbadora escena del hallazgo de un vehículo con cinco cuerpos sin vida en su interior, en la Delegación La Presa Rural.
El propósito primordial de esta intervención militar es reducir drásticamente el número de homicidios y eliminar a Tijuana de la lista de las ciudades más violentas del país. El General de Brigada de Estado Mayor, Vicente Javier Mandujano Acevedo, afirmó que se llevará a cabo una estrategia coordinada entre los tres niveles de gobierno, con un enfoque especial en las áreas de mayor incidencia delictiva.
«Estamos comprometidos en apoyar a las autoridades civiles para hacer frente a esta problemática. Nuestra meta es prevenir la comisión de delitos», declaró el General Mandujano Acevedo.
Asimismo, el oficial militar rechazó la noción de que la estrategia previa haya sido ineficaz, señalando una disminución en la cifra de homicidios durante el año 2023, y manifestando la intención de mantener esta tendencia a lo largo del presente año. Se enfatizó en la necesidad de intensificar la confiscación de drogas y armas, con la expectativa de que esto se traduzca en una reducción significativa de la actividad delictiva.
Por último, se aseguró a la ciudadanía que durante esta operación se respetarán plenamente los derechos humanos, priorizando la seguridad y el bienestar de todos los habitantes de Tijuana.
La presencia masiva de militares en la ciudad refleja el compromiso del gobierno mexicano en abordar de manera decidida la violencia y la criminalidad que han afectado a esta importante región fronteriza.